Los franceses lo llaman bio, a comer ecológico. La falta de conexión entre la comida y la cocina es lo que impide que muchos encontremos el equilibrio, la armonía y el placer. La familia que desayuna, almuerza y cena junta tiene mayor felicidad y éxito en su vida profesional y familiar, su estilo de vida les proporciona equilibrio y todo empieza en la cesta de la compra y después en la cocina. Elegir, buenos alimentos y prepararlos de forma adecuada garantiza salud y placeres. Cocinar significa conectar y es una de las claves para cambiar la relación que mantenemos con la comida y el placer, y hasta que no comprenda y controle lo que mete en su cuerpo estará simplemente siguiendo un plan sin un jefe: usted. Cada uno es responsable de su cuerpo, ya que sólo tenemos uno, ¿no es eso? El respeto tal vez no equivalga siempre a amor, pero si respetamos nuestro propio cuerpo, ese respeto acabará amasándolo, amándolo, y en cuanto lo amemos, lo cuidaremos y nos haremos responsable de él. Puro sentido común.
Es la historia básica de la amistad entre el principito y el zorro. Cambiar la relación que mantiene con la comida es justo eso. Consiga que la comida (y su cuerpo) deje de ser enemiga y conviértala en su amiga y entre en la cocina en lugar de sentarse delante del televisor o hacer otra cosa antes que cocinar, como bien puede ser estar sentada horas muertas en la terraza de un bar. No es necesario que diga que la comida casera, donde uno puede controlar las grasas, la sal y el azúcar, nos ayuda a adelgazar o, como mínimo controlar el peso. Además, seamos sinceros: hoy en día, con todos los cacharros que tenemos a nuestra disposición para ayudarnos a cocinar, preparar la comida no es un problema.
En muchos casos, se tarda sólo un poquitín más que con la comida en lata o preparada. Por los tanto, pas d'excuses. Un poco de planificación y organización y aprenderá a preparar la cena en veinte minutos o media hora. La globalización tiene sus efectos secundarios, tanto en el acto de cocinar como en la cocina. Hoy en día en Europa, dependiendo de qué estadísticas leamos, cerca del 60% de los veinteañeros carece de conocimientos culinarios. Partiendo de cero, debemos enseñarles (normalmente empiezan a caer presas del pánico en cuanto tienen hijos que alimentar) a comprar en el mercado (incluyendo el reconocimiento de los productos) para que puedan elegir los productos adecuados y enseñarles también a cocinar las verduras de manera sencilla, simple y sabrosa según la temporada.
Muchos son los que empiezan a hartarse de comer mal, por lo que las clases de cocina están multiplicándose como las setas. Es un fenómeno completamente novedoso en Europa donde nueve de cada diez ciudadanos jamás ha seguido un curso de cocina. Ahora es más como un hobby y los cursos largos, caros y complicados han caído en el olvido. En la actualidad unos de los programas-curso o concurso de cocina de más éxito es Master Chef, el cocinero famoso Carlo Arguiñano... etc y, en Francia es L'atelier des Chefs, creado por dos jóvenes apasionados de la cocina. La palabra clave es la informalidad y sus clases son cortas: una hora. Su principio en el momento del almuerzo es dedicar media hora a la cocina y luego comer: divertido, barato y una forma de estar con la gente (un aspecto importante a tener en cuenta en una época donde tantos artilugios tecnológicos aíslan al ser humano en numerosos aspectos).
Se aprende a preparar un plato por clase, una forma ideal para los <<alumnos>> en su mayoría con cero conocimientos. En tiempos de crisis económica lo que estos alumnos aprenden es que cocinar en casa no sólo equivale a disfrutar de una calidad mejor (menos sal, azúcar y grasas), sino que además supone un ahorro enorme, ya que no es en absoluto complicado preparar una comida para una familia de cuatro personas. El secreto está en asistir a escuelas que estén regentadas por chefs de verdad, pues hay algunas academias gestionadas por aficionados que ni satisfacen automáticamente las necesidades de la gente, ni disponen de los conocimientos requeridos. La gente necesita trucos y consejos, y lo que los chefs llaman <<la técnica adecuada>>. La gente necesita saber que al llegar a casa podrá replicar los platos aprendidos, y en un entorno relajado todo el mundo sale más confiado. La prueba de todo ello es que los hombres están descubriendo que las mujeres adoran a los hombres que saben cocinar.
Ha llegado, por lo tanto, el momento de cambiar el dicho español de que al hombre se le conquista por el estómago; en francés de que l'amour de l'homme passe par l'estomacac. Con unas cuantas clases y una buena base es fácil volver a casa, ponerse a practicar y estar muy pronto a punto para preparar nuestras propias innovaciones e improvisaciones. Cocinar con ingredientes frescos y de alta calidad es la parte más importante de la preparación de una buena comida (lo es), tener una cocina equipada con los productos, las especias y las herramientas adecuadas es el segundo paso en importancia.
A mucha gente le cuesta mantener una despensa bien surtida, pero saber qué especias hay que tener a mano y en qué herramientas de cocina invertir es de hecho bastante sencillo... y a largo plazo le ahorrará dinero. Y sepa que comprar perejil, la albahaca y otras especias deshidratadas es tirar el dinero... su sabor es real y explosivo única y exclusivamente cuando son frescas; compre las especias frescas o cultivelas. Me preguntan a menudo si consumo alimentos ecológicos. Los franceses lo llaman "bio", a comer ecológico. Y no todos los alimentos ecológicos se traducen automáticamente en la mejor calidad y, por lo tanto a los nutrientes se refiere, no existe gran diferencia entre la mayoría de alimentos ecológicos y su contrapartida comercial y no ecológica.
Si compra en el mercado local, se decanta por alimentos de temporada y minimiza en su dieta los alimentos procesados estará actuando de manera adecuada. Pero si puedo, consumo productos ecológicos por dos razones. La primera es el sabor. La mayor parte de los productos ecológicos que compro en el mercado local saben mucho mejor que los que pueda encontrar en los supermercados.
Ello se debe en parte a esa poca concentración adicional y a esa pureza de sabor que encuentro en los productos ecológicos, pero sospecho que un refuerzo adicional del sabor es la frescura de los productos del mercado con respecto a la de los del supermercado. Muchos, pero no todos, de los productos ecológicos del mercado me saben mejor que los productos ecológicos que pueda haber en el supermercado, y lo atribuyo a su frescura relativa más que al origen particular y al tipo de cultivo de esos alimentos.
En cuanto al precio, sí, lo ecológico resulta algo más caro (piense en el trabajo adicional de cultivo que estos productos exigen, en que se trata de cosechas más pequeñas y en otras prácticas <<no comerciales>>, y agradezca que haya gente que se preocupa por cultivar estos productos para alimentarlos), pero recuerde siempre el sabor. En este caso, aplica mi teoría de que <<todo está en los primeros mordiscos>>, de modo que compro un poco menos, lo disfruto más y la solución me funciona de un modo asequible y sano.
La segunda razón por la que prefiero lo ecológico es más importante. Prefiero comer alimentos cultivados sin pesticidas, sin fertilizantes químicos y sin suplementos. No quiero meter con regularidad en mi cuerpo ese tipo de cosas. No quiero correr el riesgo de sufrir los efectos secundarios (alergias y enfermedades) que potencialmente pueden provocar estos productos químicos.
Y sobre todo en lo referente a determinados productos, como los pollos y los huevos. Todo el mundo ha oído hablar de esas cantidades enormes de pollos que jamás han visto la luz del día, que parecen anoréxicos, están alimentados con basura y pastillas, tienen un sabor artificial y producen, literalmente, huevos <<podridos>>. Igual trato reciben los cerdos y los terneros. Prefiero no comerlos, si no están criados con total garantía en <<libertad>>. Amén.
Mireille Guiliano nació y creció en Francia. Es autora de los libros Women, Work & the Art of Savoir, Las mujeres francesas disfrutan todo el año y no engordan, y del bestseller Las mujeres francesas no engordan. Está casada con un americano y reside entre Nueva York, París y La Provenza. Lo deja bien claro entre sus líneas: Las mujeres francesas no pierden la línea. <<Hay una frase en mi biografía que siempre incita alguna que otra carcajada cuando me presentan: <<Sus pasatiempos favoritos son desayunar, almorzar y cenar>>. Y es verdad: la gente siempre se ríe y a mí me encanta comer y estructurar mi vida en torno a la comida.>>
<<Recuerdo cuando presenté a mi marido, Edward, a mi familia en Francia, un suceso que prácticamente giró en torno a las comidas. El aroma de un pastel recién horneado para desayunar atraía a Edward hacia la cocina donde encontraba además zumo de naranja recién exprimida (un detalle más americano que francés, aunque zumo recién exprimido con toda seguridad tratándose de casa de mis padres), después algo de proteínas en forma de huevos, queso o yogur, para continuar con el pastel y café, también recién hecho.
Nada exhaustivo ni elaborado pero, sin lugar a dudas, una forma sana de empezar el día. Antes de que se levantara de la mesa mi madre estaría ya hablando del almuerzo y empezando a prepararlo. Edward no tardó mucho tiempo en comentarme: <<¿Sabes? Tu familia siempre está comiendo o hablando de comida>>. Una verdad como un templo. Unos años después, en el transcurso de una de esas comidas familiares, Edward preguntó con timidez: <<¿Sería posible comer y disfrutar de esta comida antes de empezar a hablar y planificar la próxima?>>
<<Al parecer nosotros dominábamos un arte que él desconocía, el de disfrutar el presente y anticipar a la vez, con todos nuestros sentidos, lo que está por llegar. Es, sin duda, una característica francesa. En la actualidad siempre que comemos juntos en restaurantes franceses y escuchamos por casualidad a la gente comentar, mientras come, los detalles de comidas recientes, o hablar sobre futuras comidas en otro restaurante, o compartir recetas e historias relacionadas con la comida, nos lanzamos una mirada cçomplice y nos encogemos de hombros. Sí, el desayuno, el almuerzo y la cena son mis pasatiempos favoritos, y así es cómo he organizado este libro de recetas e historias. Pero las fronteras pueden a veces resultar confusas.>>
<<Yo me crié haciendo mi comida principal al mediodía. ¿Es necesario, pues, distinguir entre el almuerzo y la cena? En muchas áreas geográficas, y a lo largo de gran parte de la historia, ambas reciben y han recibido el mismo nombre. En estos casos la última comida del día es más ligera que la del mediodía y recibe con frecuencia un nombre cuyas raíces son atribuibles al verbo francés souper, que hace referencia a la sopa, un plato muy común en la cena cuando la comida del mediodía ha sido la principal.>>
<<¿Y quién nos dice que no podemos comer huevos revueltos de vez en cuando para cenar? Por lo tanto, ya se trate de sopas o ensaladas, carnes o pescado, pastas o verduras, las recetas que encontrará a continuación son una invitación a que cada uno lleve a cabo su combinación propia y personal. He decidido expresamente no seguir siempre la lógica convencional y no presentar de forma secuencial y cartesiana todos los platos de pollo por un lado o todos los platos de pasta por otro... Considero importante comer tres veces al día, comer con moderación y disfrutar de comidas equilibradas que incluyan proteínas, grasas y carbohidratos. Es mi forma de vivir.>>
<<El desayuno es quizás la comida más importante y, por simple que esto suene, es la que proporciona el combustible para las primeras fases de la jornada. Según mi experiencia, la gente que no <<desayuna>> o que <<sólo se toma un café>> es exactamente la misma que a las once de la mañana está comiendo cosas que engordan, principalmente carbohidratos, en su mesa de trabajo o en la cocina. O que por sentirse deshidratada o hambrienta bebe refrescos a modo de reconstituyente. O que si está atrapada por una reunión o una conferencia o por la actividad que sea, llega a la hora del almuerzo sin haber comido nada y se sobrepasa entonces... Un recordatorio: <<desayune.>> Y no se exceda utilizando azúcar a modo de estimulante matutino comiendo raciones descomunales de zumo de fruta, cereales con azúcar añadido, panes y pasteles...>>
<<Al parecer nosotros dominábamos un arte que él desconocía, el de disfrutar el presente y anticipar a la vez, con todos nuestros sentidos, lo que está por llegar. Es, sin duda, una característica francesa.>>
Ojalá, los hombres y mujeres que gobiernan en este tiempo los pueblos y naciones de la Tierra, pudieran aprender a dominar este arte francés que explica la autora Mireille Guiliano: <<El de disfrutar el presente y anticipar a la vez, con todos nuestros sentidos, lo que está por llegar.>> <<Es importante un análisis objetivo de la evolución de la población española, su situación actual, su distribución, estructura y futuro, ya que es una variable básica sobre la que se tiene que asentar todo estudio y acción sanitaria. El envejecimiento de la población y los movimientos migratorios interiores son muy interesantes, pues cualquier programa sanitario los debe tener presentes. Los servicios sanitarios y la acción médica son variables, en parte dependientes de la estructura interna de la población, su proyección en el espacio físico del país y su futuro.>>
<<España tiene todavía una tasa de natalidad relativamente elevada, comparativamente a otras naciones europeas, y su cifra de mortalidad es más bien baja. Consecuentemente la tasa de crecimiento anual es mayor que la mayor parte de los países europeos y en unos setenta años se podría duplicar una población que, sin embargo, tiene una densidad relativamente baja, en relación con los países de Europa más industrializados, con los que manifiesta un cierto retraso económico, medio por el consumo de energía. La población posee un mecanismo de renovación, la natalidad y otro de mantenimiento, el evitar la mortalidad.>>
<<Sin embargo, como a la larga la muerte puede diferirse, pero no suprimirse, lo principal es que la población no envejezca, sostener una natalidad suficientemente alta. En general la evolución socioeconómica conlleva una disminución paralela de la mortalidad y de la natalidad. Industrialización, urbanización y envejecimiento de la población son variables que están interrelacionadas. España no escapa, como es lógico, a esta regla general...>>
<<El control de la natalidad es un hecho en España, consecuencia de una serie compleja de hechos socioeconómicos y culturales. Se puede comprobar que el consumo de anovulatorios es suficientemente más elevado en España, en relación, incluso, con otros países europeos y comparativamente a su población, y tiende a incrementarse. El envejecimiento de la población supone unas cargas adicionales a la población activa que debe sostener a los viejos y complica y encarece el funcionamiento de los servicios sociales y sanitarios. El problema del envejecimiento de la población es, pues, muy importante, porque condiciona un cierto cambio en la estructura de los servicios sanitarios que deben atenderles. Según sea la filosofía de la asistencia a los ancianos, así se estructurarán estos servicios. <<Es muy importante para mantener la Paz Mundial La Distribución de la Población en el Espacio y Lugar donde nacen>>.
<<Como afirman Bogue y Hausser: <<Todo movimiento migratorio es una respuesta humana masiva a un desequilibrio fundamental en algún punto del sistema social y, a la vez, un síntoma de la actuación de poderosas fuerzas económicas y sociales>>, la resultante es un binomio atracción-repulsión, una bipolaridad de fuerzas antagónicas. La mayoría de las migraciones españolas se producen por diferencias de tensión demográfica sobre los recursos económicos disponibles, por eso, de acuerdo con la terminología de Petersen, nuestra migración interior es innovadora, por ser su objetivo una mejora del nivel de vida, no un mantenimiento de unos ideales (migración conservadora). Las emigraciones interiores se rigen por dos reglas generales:
<<1. Tendencia a aumentar la población urbana, y 2. Movimiento hacia las zonas con acumulación de capital, con incremento de las inversiones y creación de puestos de trabajo, todo lo cual es lógico. El crecimiento vegetativo más acusado en las zonas pobres y en las áreas rurales es absorbido así por las zonas industriales y turísticas (transferencias de trabajadores del sector primario al secundario y terciario). En 1975 en España: <<El Centro, Sur y Noroeste de España envían gente joven, activa y trabajadora a Madrid y a la costa, especialmente la costa norte y la mediterránea, las cornisas septentrional y oriental meridional. <<O a Madrid o al mar>>, a la ciudad inmensa o al inmenso mar, puede ser el lema de los emigrantes. Realmente el movimiento migratorio interior en España es importante, ya que en el bienio 1964-65 el promedio anual de personas que abandonaron sus municipios es de alrededor de 475.000. En el quinquenios 1961-65, el total de emigrantes fue de 1.915. 602, es decir, el 6,1 por 100 de la población media calculada.>>
<<En general, el 35 por 100 de los emigrantes interiores acostumbraban a dirigirse a centros más desarrollados dentro de una misma provincia... Consecuencias secundarias son los problemas de vivienda que se agudizan en las grandes ciudades y la aparición de amplios suburbios, con todas sus graves consecuencias sanitarias y sociales... El proceso de concentración de la población del producto y de la renta en las áreas más pobladas y más ricas se ha acentuado en el bienio 1969-1971. -Se observa, sin embargo, una cierta saturación en las provincias con mayor nivel de producción según su superficie. Las provincias más desarrolladas, pero con menor producción por kilómetro cuadrado, tiende a beneficiarse de esta circunstancia y especialmente las de la periferia...>>
<<Un hecho importante es que, nada menos que dos millones de españoles en la mejor edad de producir abandonaron en diez años el país por no encontrar en él suficientes medios para una subsistencia digna del mundo contemporáneo y del área geográfica en que nos desenvolvemos. Los principales países europeos que reciben emigración española son: Francia, Alemania y Suiza, y en América: Argentina, Brasil y Venezuela. En resumen, las tres cuartas partes de los emigrantes señalan, en primer lugar, como motivación para emigrar, ésta: <<Porque puedo ganar más y vivir mejor en la ciudad y en el extranjero>.
Como dice José García Abad: <<La emigración de la población campesina ha sido consecuencia del bajo nivel de vida de las áreas rurales: eventualidad del trabajo, deficiencias de servicios educativos, sanitarios, etc... Los defectos de distribución de la tierra que oscila entre el latifundio, más propio de la mitad norte, el paro estacional, que agrava la situación de la población que no puede afincarse a un área geográfica deprimida y que sabe que existen posibilidades en otras zonas...>>
<<La gente no es tan estúpida, afirma Amando de Miguel, que busque residir en las grandes urbes porque encuentre un especial placer en vivir hacinada. La gente sabe que es más probable realizar una vida humana y mora en los lugares donde las decisiones importantes se toman, donde se acumula la inteligencia y la información (un tipo de bienes cuyos costes de transporte son los más altos de todos). Ello supone más puestos de trabajo mejor remunerados, comunicaciones más rápidas, centros educativos más adecuados. Mientras los seres humanos tengan que organizarse con recursos escasos y mientras amen el progreso, la tendencia urbanizadora hacia grandes metrópolis es algo irreversible.>>
<<Sin embargo, las necesidades de servicios en las ciudades en crecimiento es considerable, viviendas, escuelas, abastecimientos de aguas, alimentos, etc., lo que produce un coste social importante en la población inmigrada... No puede dudarse que los factores económicos juegan un importante factor en el nivel de salud de los pueblos. El aspecto de la salud y la enfermedad cambian según el nivel socioeconómico que se alcance. Sin embargo, el fin último del desarrollo no es el consumo de bienes y la utilización masiva de servicios, sino una mejor calidad de vida y la liberación del hombre de sus necesidades básicas con objeto de facilitar el desarrollo de su propia personalidad. Es muy importante para la convivencia pacífica el reparto de la renta nacional, Política de equidad.>>
(¡Quién más tiene que sea quien más pague! No permitir la acumulación de la riqueza a partir de un tope considerable nadie puede retener y acumular en perjuicio de la mayoría empobrecida. Cuando un nuevo rico millonario surge, millones de seres humanos han perdido calidad de vida.)
<<Un hecho incontrovertible es que los hombres tienden a distribuirse, según sus diversas características, de forma desigual, altura, peso, inteligencia, habilidad manual, etc. Ya el sociólogo Pareto afirmaba: <<Nos enfrentamos, por así decirlo, con un gran número de cristales de la misma composición química. Son cristales grandes, medianos o pequeños (rentas grandes, intermedias o reducidas); pero todos de la misma forma.>>
<<Por lo tanto la política eficiente para mejorar la distribución de la renta tendría que ser la de aumentar su cuantía, puesto que su distribución obedece a diferencias y valores innatos de los diversos sujetos: <<Sería inútil -concluye Pareto- recurrir a una división de la renta para establecer la equidad. Tras un corto lapso de tiempo, las desigualdades que se han destruido volverían a reaparecer. La igualdad solamente se podría mantener por medios de redestribución periódicas realizadas en intervalos cortos.>>
<<Esto quiere decir que en la Sociedad, naturalmente se tiende a repartir el producto social de forma desigual y se precisará de un mecanismo equilibrador (en un sentido cibernético) que pudiera redistribuir la renta, éste no puede ser otro que el Estado.>>
<<Es evidente que un buen reparto de la renta tiene indudables ventajas: disminuye las tensiones sociales, desde el punto de vista sanitario puede contarse con que el individuo y la familia cubrirían sus necesidades básicas; un euro adicional proporciona mayor felicidad a un pobre que a un rico, y pasando el mínimo aumentaría la propensión al ahorro de las economías domésticas.>>
<<Incluso desde el punto de vista de la doctrina keynesiana, el reparto de la renta es capaz de estimular la demanda a un nivel adecuado y conseguir el pleno empleo posibilitando un nivel óptimo de utilización del equipo de producción. Sin embrago, es bien cierto que para repartir hay que producir suficientemente y que en una economía de mercado, e incluso en una economía dirigida, el estímulo de la ganancia individual es un fuerte incentivo para el trabajo. El problema no está exento de dificultades.>>
<<Uno de los problemas más difíciles es conseguir un crecimiento rápido con un pleno empleo y una equitativa distribución de la renta sin tendencias inflacionistas. El sistema económico se demuestra entonces como una estructura extraordinariamente delicada, una posible solución sería interesar a los asalariados en la formación del capital, pero para eso habría que asegurarles un nivel de vida suficiente; en algunos países se ha ensayado el efectuar el ahorro y la capitalización a través de los mecanismo de la seguridad social.>>
Ojeada a la renta Mundial individual (Tomado de Desarrollo, domingo 3 de junio 1973). <<¿Veinticinco países equivalen al mundo? Desde luego, no. Pero un haz de naciones, cuando es representativo -realizando una cala en varios continentes-, puede dar una visión clara de la distribución de la renta <<per cápita>> en el mundo... Una primera respuesta a esta problemática sería la de expresar y dar cuenta de la fosa que separa a los países en el contexto mundial. Desde los 4.760 dólares de renta individual de los norteamericanos a los 120 dólares anuales de los nigerianos media, efectivamente, muchas distancia... Y la gravedad de esa situación no se concreta, por desgracia, a una situación coyuntural adscrita al año 1970. Todas las perspectivas vienen a indicar que esa fosa irá ampliándose en el futuro por amor de la separación que separa a la tecnología de las exportaciones primarias...>>
<<En un artículo de José García Abad, basado en el informe del Banco de Bilbao del año 1969, se señala: 1º. España, globalmente considerada, ha superado el subdesarrollo. 2º. La población y la renta tienden a concentrarse en las provincias más desarrolladas. 3º. Se están atenuando las disparidades de la renta de las distintas provincias. 4º. Se confirma el fenómeno de <<la mancha de aceite>>, según el cual las regiones prósperas se desbordan en favor de las vecinas. 5º. Persisten las <<bolsas>> del subdesarrollo.>>
<<Llega el Banco de Bilbao a la primera conclusión al comprobar que, contra los pronósticos de los organismos internacionales especializados, hemos alcanzado en el año 1971 los 1.000 dólares de renta por persona en lugar de conseguirlo en 1975 como estaba previsto. El informe llega, además, a la conclusión de que si continuamos con el pasado el ritmo de crecimiento en 1975 habremos alcanzado los 1.500 dólares. Eso sí -advierte el Banco-, sin tener en cuenta el efecto de precios.>>
<<En el informe del Banco de Bilbao, referido a 1971 se demuestra las diferencias de los niveles de renta <<per cápita>> no se han aminorado porque las provincias pobres desarrollan su riqueza en mayor proporción que las provincias ricas, sino por vía de una intensa emigración hacia las áreas urbano-industriales. En 1971, las cinco provincias españolas equivalente a la de las cuarenta provincias con menor nivel de producción. Las cinco provincias con mayor renta <<per cápita>> (Guipúzcoa, Vizcaya, Álava, Madrid y Barcelona) tenían en 1969 el 38,92 por 100 de la renta interior y en 1971 han pasado a tener el 40,11 por 100. Mientras las cinco provincias con menor renta <<per cápita>> en 1969 (Orense, Almería, Jaén, Cáceres y Granada) bajaban del 4,39 al 4,34 por 100 de la renta interior.>>
<<Sin embargo, es significativo el hecho que no sean estas provincias más deprimidas las que han perdido más importancia relativa en el cómputo total de ingresos, sino más bien las provincias de renta <<per cápita>> media. En resumen, hay una España cada vez más rica y una cada vez menos pobre, pero más diferenciada de la primera. El mayor nivel de vida del país se extiende en una línea que comprende el Cantábrico, valle del Ebro, Cataluña, Baleares, además de algunos núcleos interiores como Madrid y Valladolid.>>
<<Las bolsas de pobreza son: a) Lugo-Orense; b) Cáceres-Badajoz; c) Almería, Granada y Jaén, provincias todas que no alcanzan las 45.00 pesetas de renta <<per cápita>>. Algunas de estas áreas coinciden con la lusitania interior delimitada en el informe FOESSA de 1970. Es claro que estas provincias con renta baja albergan una población dependiente casi toda ella del sector primario (agrario y ganadero) que viven de monocultivos poco rentables muy sujetos a las inclemencias del tiempo y a los vaivenes del mercado, lo que supone un paro estacional o encubierto y que, incluso, habitando grandes poblaciones no pueden evitar el calificativo de <<ciudades>> rurales (por ejemplo, grandes poblaciones de la mitad meridional de la Península).>>
<<Ricardo Maroto de Luis, en un interesante trabajo, afirma que las desigualdades de las rentas percibidas por las familias españolas es considerable: Estas cifras para 1972 han sido corregidas de acuerdo a los nuevos índices de salarios y rentas, y la distribución socioeconómica de la población española la estimación así: <<Teniendo en cuenta que la familia española está compuesta por un promedio de cuatro miembros, podemos decir que son cerca de la mitad de los españoles los que tienen una renta <<per cápita>> de 1.000 a 1.200 dólares, este promedio se consigue por los ingresos de los poderosos, que no por el de los pobres, aun a pesar de que éstos contribuyen a la formación de la renta nacional con los impuestos de su trabajo personal en más del doble de lo que hacen las rentas de capital. Está claro que las diferencias entre capital y trabajo mantienen la misma posición que de partida, y si el crecimiento del producto nacional bruto es un hecho, también lo es que el mismo podría repartirse con más equidad.>>
<<Un trabajo del profesor Ramón Tamames, demuestra la irregularidad y desigualdad de la distribución de la renta en España. De la de presupuestos familiares del INE llevada a cabo entre marzo de 1964 y marzo de 1965, se deduce que más del 80 por 100 de las familias españolas percibían ingresos menores del promedio nacional. Ramón Tamames, Introducción a la Economía Española, <<El Libro de bolsillo>>. Alianza Editorial, Madrid, 1967.>>
<<¡Oyeme! ¿Tú tienes hijos? ¿Cuántos? ¿Tú, si tú, tienes hijos? Sabes lo que es ver a tus hijos morir de frío y de hambre. Yo, sí lo sé. Dios ha querido que despierte mis vidas anteriores, en la antepenúltima vida, soy una nativa india de la Nación Lakota, nieta , hija y esposa de jefe. Me veo morir de hambre dentro de un tipi, afuera todo estaba bajo un manto de nieve, no había qué comer y irremediablemente veo morir a mis dos hijos de corta edad de hambre y por frío. Huimos de una cacería del Séptimo de Caballeria. Cuando agonizaba, veo entrar a mi esposo con un conejo flaco en una mano y en la otra un viejo fusil, era el Jefe Pluma Blanca un profeta de aquel tiempo... Sus profecías deberían ser estudiadas con profundidad, hablan de lo que está aconteciendo en este momento, y se puede evitar un gran descalabro mundial, si se hace caso de sus advertencias... ¡Si la razón vence al corazón el mundo desaparecerá! Es decir, si el capitalismo o lo material vence al amor. ¡Nos vamos...!
Crecer, multiplicarse y llenar la tierra de hombres y mujeres es una bendición y un mandato de Dios a los israelitas antiguos a través del Padre Abrahán. ¿Es posible, padres, que hayáis olvidado lo que exige la dignidad? Israel. ¿No os dais cuenta de que sois los colaboradores de Dios en la transmisión de la vida? Y aquí entregó los Diez Mandamiento a través de Moisés y la Torá, con toda la Sabiduría del Universo. ¡Qué ruines y tacaños son los hombres! Dejan morir de frío y hambre a los hijos de Dios. De ese cúmulo de sufrimiento, de ese rimero de egoísmo por acumular riqueza y tierras, el único que saca fruto y partido es el Diablo, el primer interesado en que vayan pocos hijos de Dios al cielo. Israel y sus aliados, están haciendo el juego al Diablo Lucifer, un juego revuelto, sucio, asqueroso.
No me puedo callar. No podemos andar con paños calientes si pretendemos curar una herida que sufre la sociedad actual y que tiene todos los síntomas de gangrenosa. Se hace preciso cortar y sajar, para que la gangrena no llegue al corazón. Si fuesen paganos, no me molestarían que hablarán de control del terrorismo. Pero, a quién Dios elige y entrega sus Preceptos, Leyes y Mandamientos. ¡Allá ellos! Pero dicen que son creyentes del Creador, del Santo, Bendito Sea. ¡Desmemoriados! Ahora ellos ocupan el lugar del faraón egipcio, oprimiendo a los hombres y obligándolos a emigrar de sus tierras. ¿Es posible que ya hayan olvidado el Apocalipsis? ¿Han olvidado el Éxodo, el Mar Rojo, y la esclavitud en Egipto?
Yo que soy una ignorante, te digo Israel que el Quinto Mandamiento dice: ¡No Matarás! Ahora no me callo yo. Cuando yo calle, Dios os hablará. ¿No has oído nunca las voces que surgen del mundo de los muertos por guerra, hambre y frío? Es un reino en el que solamente hay voces, griterío y ansiedad; voces, gritos y ansias de vengarse, espíritus que quisieran hacerse carne.
Los que mueren por hambre y sed lloran y gritan, están ahí diciendo sin interrumpir el grito: Tengo hambre. ¿Por qué no me dais de comer? Tengo sed: ¿Por qué no me dais de beber? Tengo frío. ¿Por qué no me cubrís con mantas?, ¿por qué me refugiáis? Ando peregrino en la tierra, estoy perdido en la nada. Tengo hambre y sed de paz! ¿No me oís? ¡Quiero vivir en mi tierra, junto a mi familia! ¿Tampoco Tú, Padre del Cielo, me quieres atender? ¡Padre, Padre! Te llamo Padre pensando que algún día podré decíertelo de verdad: ¡Padre bueno, Padre misericordioso, Padre piadoso, ven a Palestina!
Cuando a la vista de las miserias, desventuras, desdichas e infortunios, Cristo clama: ¡Venid a Mí todos los que andáis agobiados con trabajos y cargas, que Yo os aliviaré!
Tú dijiste, Jesús, que todos los hijos fuéramos a Ti, pero los padres no nos dejan. Tú predicaste que no nos entorpecieran el acercarnos a Ti, y los padres nos estorban, Jesús, nos estorban. Tú enseñaste, Jesús, a todo el que quiso escuchar: ¡Vale más un hombre que una oveja! (Mateo XII, 12). ¡Pero son tan pocos los que te hacen caso, Señor! Para los hombres de ahora -que por lo visto no leen ni la Biblia, ni la Torá ni mucho menos los Evangelios- los hijos valen menos que los cabritos. Tú adoctrinaste a los hombres para que no arrojaran a los perros ni a los cerdos las perlas y las cosas santas, pero los hijos de la Tierra pensamos: ¿a quién les darán las perlas y las cosas santas si nuestros padres mueren en las guerras?
Jesús, aquí en el reino de la nada, el reino del amor posible, nos preguntamos si habrá llegado ya el final de los tiempos, el tiempo peligroso, ya que <<en los tiempos postreros -dice la Escritura- se levantarán hombres egoístas, codiciosos..., rebeldes a sus padres, ingratos..., desnaturalizados, desleales, fieros..., inhumanos, traidores, hinchados y más amadores de placeres que de Dios, mostrando, sí, apariencia de piedad, pero renunciando a su espíritu>> (Timoteo II, 1-5). ¡Si estará llegando ya el final de los tiempos!
Y lo que el hijo no puede decir os lo digo yo como amigo. Sí, así sois, ¡codiciosos! Os pudre el dinero. Sí, así sois, ¡inhumanos!, con carroña en el corazón. Sí, así sois, ¡traidores y tramposos!, ¡fariseos!, con apariencia de piadosos. Avaros de deleites más que de Dios. Os interesa más el dinero que los hijos, ¡mezquinos! ¿Queréis dinero? ¡Tenedlo! ¡Guardadlo bien! Pero tengo que deciros que me da miedo que el día de la cuenta os puedan condenar como a Simón el Mago: <<Perezca contigo tu dinero>>.
<<Os conjuro por el Señor -adoctrina Pablo de nuevo- que os apartéis de manera digna de la vocación a que habéis sido llamados>>(Eph., IV, 1). Si queréis tener dinero, podéis retener parte del precio de vuestro campo para vuestros caprichos. ¿Quién os quita el conservarlos? Pero no hagáis trampas, como Ananías y Safira. No mintáis. No queráis aparentar que es poco el dinero de que disponéis para tener a los hijos trabajando. No seáis tramposos; no sea que os castigue Dios con la muerte, porque habéis negado la vida a vuestros hijos. ¿Por qué volvéis a argumentar con la posible miseria que le aguarda ahí entre vosotros? Había gentes que seguía a Cristo <<sin tener que comer>> (Mateo XV, 32), ¡pero le seguían! Y eso es todo lo que hay que hacer en la vida.
¡Padre! Si yo te dijera todo lo que pienso de esa poca hambre que se puede sentir por un poco de tiempo en esa tierra, antes de entrar en el Cielo... Te lo voy a contar. Escúchame. Yo hubiera querido ser como aquel chiquillo que cerca de Betsaida -¿lo recuerdas?-, cuando Andrés andaba como loco buscando un poco de pan para los cinco mil que tenían hambre en torno a Jesús, le dio sus cinco panes, que su madre le había preparado al salir de casa. ¡Yo hubiera querido ser aquel chiquillo! ¡Se lo entregó todo, Padre! ¡Le entregó todo lo que tenía! Y sus panes de cebada redondos como tortas, fueron a para a una cesta a las manos de Nuestro Señor Jesucristo. (Esto es bien cierto, ver el milagro de los panes es el mejor regalo de Dios para mí. Aquel cielo azul, con nubes blanca, aquella gente tan alegre, Jesús y Sus Apóstoles y que guapo era el puñetero Judas..., que verde todo)
¡Si vieras, Padre, cómo se multiplicaban los panes en las manos de Pedro, de Juan, de Marcos, de Lucas, de Andrés, de Felipe, de Santiago, de Judas. ¡hasta en las manos de Judas se multiplicaban los panes del chiquillo! ¡Qué suerte la de aquel hijo con los padres que tenía, los que le dieron la vida y los panecillos! ¿El chiquillo se quedó sin pan?, ¡no!, le sobraran cinco canastas de panes redondos y hermosos. ¡Y qué, Padre! ¿No ves que dio de comer -él con Él- a cinco mil personas? Aquí, en el reino de los muertos, no puedo hacer nada por aliviar el hambre de los otros hombres. No puedo hacer nada por ellos. ¡Si supieras! Yo también tengo hambre, Padre, hambre de vida. Y nosotros, por mucha hambre que tengamos, nunca seremos bienaventurados. <<Tengo por cierto que los padecimientos del tiempo presente no son nada en comparación con la gloria que ha de manifestarse en nosotros>> (Romanos VIII, 18).
¿Verdad que no os dicen nada estas palabras de la Escritura Santa? ¡Qué os van a decir! Vosotros, desconocedores de la doctrina de Cristo, habéis preferido aprenderos la lección de la prudencia humana: ponderación, mucha ponderación; mesura, reserva, previsión, muchísima previsión, moderación, precaución, nada de exponerse, y ¡pocos hijos! Para qué, para que se los rapten o se los lleven a las guerras. ¡Qué prudencia la vuestra! Lo es -ciertamente- la Serpiente está unida al Exterminador. ¿No recordáis que también hay que ser sencillos como palomas? La comparación del señor no hace sólo referencia a lo que se arrastra por los suelos. También quiere que os parezcáis a lo que vuela por las alturas.
¿Entendíais que la prudencia de la que nos habla el Señor es la de la carne? ¡No! La prudencia de la carne es muerte. Él desechará y destruirá esa prudencia de los prudentes de la carne. Desde Corinto amonestaba San Pablo a los romanos. Pagad a todos lo que les debéis: a quien temor, temor; a quien honra, honra. Desde la nada os amonestamos: pagad a todos lo que debéis; a quien vida, vida. Pero no tengáis miedo. No os podemos hacer daño. El Diablo se encarga... ¡Cristianos! ¿No os estaréis contagiando de todos los vicios y crímenes de los que ni creen ni esperan en Dios?
<<Se mezclaron con las gentes, y adoptaron sus costumbres. Y dieron culto a sus ídolos... Sacrificaron a sus propios hijos y las propias hijas a los demonios; derramaron su sangre inocente, la sangre de sus hijos y sus hijas, sacrificándolos a los ídolos de Canaán. Y quedó la tierra contaminada por la sangre>> (Ps. CVI).
Os fijáis en los paganos cuando decís: ¡Tampoco ése, ni ese otro tienen hijos! Yo también podría señalarte muchos más: ¡ni éste, ni ése, ni aquél quisieron que se los raptarán o se los llevaran a la guerra, ni quisieran tenerlo enterrados en sepulcros en las praderas. Si los primeros cristianos, en lugar de vivir en la fe y su esperanza en Cristo y en lo que les pedía la naciente Iglesia, hubiesen mirado en su derredor, lo que hacían los paganos de su tiempo, hubieran continuado como ellos, amigos de los dioses de barro o de piedra.
Si continuamos abriendo desmesuradamente la mano, entrarán en nuestras iglesias esos nuevos cristianos sin Cruz y sin la Madre de Jesús -hay muchos cristianos sin cruz y sin Madre-, que acabarán por extrañarse al ver un Cristo pendiente del madero.
Es un clásico el cuento de una <<buena>> mujer que trataba de comprar algo en una tienda de antigüedades: -Deme un Cristo de veinte euros. ¡Que sea pequeño! Es para el dormitorio y me da mucho miedo verlo colgado de la cruz.
Llevamos sobre nuestros hombros el peso muerto de una época ególatra, tranquilona y facilona, que se deja sentir en la misma formación que muchas veces damos los cristianos a los nuestros. ¿No has pensado que se podía escribir un opúsculo que se titulara: <<El mínimo necesario para entrar en el cielo>>? Sería un éxito editorial seguro. En él se podría hablar del menor número de hijos que se puede tener para continuar siendo cristianos... Los cristianos de ahora tenemos la idea -falsa- de que el dar supone perder lo que se da. ¿Qué podéis entender, entonces, de la santidad, si el primer paso que hay que dar en este mundo hacia el camino de la salvación, es el camino del Amor es olvidarse por completo de uno mismo? Esta es la condición, tanto del amor a Dios como del amor humano.>>
<<¡Creedme! Es doloroso que piense así, pero dais la impresión de que sois gente con sólo un poquito de fe, con sólo un poquito de esperanza. He ahí la raíz de vuestra falta de generosidad.>>
<<Queréis hacer lo necesario, exclusivamente. Queréis hacer aquello, y sólo aquello que resulte imprescindible para entrar en el Reino, ¡si es que hay Dios!, pero sin excederse en nada. ¡No sea que no haya Dios y hayáis perdido el tiempo! Es doloroso pensar así, pero es vuestra postura la que me sugiere ese terrible comentario. Es así como uno se explica tantas cosas vuestras.>>
Así se entienden vuestras limitaciones y vuestras prudencias al limitarse a pedir a Israel que dejen pasar ayuda humanitaria, pero no a cesar los combates contra Gaza, no comprendo vuestras limitaciones y vuestras prudencias ante tal barbarie, porque es un genocidio. Deben saber que El Escenario del Teatro del Mundo está dispuesto, y los actores han escogido el libreto. Un nuevo acto de la tragedia va a comenzar. ¡Europa arderá en llamas! Europa será destruida!, eso es lo que dicen los magos de las finanzas de Sión.
Ahora comprendo ese rezar a Dios por las mañana, por las tardes, por las noches, para después, durante el día, matar indiscriminadamente a los hombres y mujeres indefensos. Creéis, sí, como para poder rezar y aplacar así su ira -¡no os vaya a castigar!- pero no creéis como para entender que el Señor se ocupa de vuestra familia y de toda la Creación. Creéis, sí, como para dar en ofrenda un poco de la sangre de vuestros propios hijos, que es el primer pretexto para atacar a los palestinos de Gaza. Esta mentira está costando un alto coste de muchas vidas, y puede costar muchos millones más.
Esta situación es comparable a la chispa que desató la revolución de las colonias británicas, fue el incidente de la Fiesta del Té. En diciembre de 1773, el gobierno del rey Jorge III de Inglaterra aplicó un impuesto a todo el té importado por las colonias, en una nueva vuelta de tuerca a una política fiscal que los norteamericanos consideraban completamente desproporcionada.
<<Las protestas contra la metrópoli se generalizaron hasta el punto de que varias docenas de colonos disfrazados de <<indios>> aprovecharon la noche para abordar tres barcos que acababan de llegar al puerto de Boston cargados con la preciosa mercancía, y arrojaron todos los fardos al agua. Las autoridades locales culparon a los <<masones>> de haber provocado el incidente, y lo cierto es que unos cuantos formaban parte del grupo de abordaje.>>
<<La taberna Green Dragon, próxima a los muelles de Boston, era el escenario de las reuniones habituales de la logia Saint Andrew's, pero la escasa asistencia en la noche de los sucesos aconsejó posponer la reunión. La sala fue utilizada entonces por una extraña organización llamada Hijos de la Libertad, cuyos miembros, algunos de ellos masones militantes, fueron los que se disfrazaron de indios y procedieron a la acción. Poco después se produjo la famosa cabalgada de Paul Revere, un de los héroes de la revolución americana, que a las diez de la noche salió al galope para avisar a las tropas independentistas agrupadas en Lexington de que el ejército realista británico estaba a punto de atacarlos.
Recibido el aviso, los milicianos de Massachusetts se adelantaron y empujaron a los británicos hacia la localidad de Concord, donde, enfrentados por una fuerza rebelde aún mayor, se vieron obligados a retirarse a Boston. Cerca de 300 soldados británicos murieron en esa batalla, la primera simbólica victoria de las tropas revolucionarias.
Paul Revere era uno de los masones de la logia de Saint Andrew's. A partir de ese momento, la influencia de la masonería, no sólo en la génesis y fundación, sino en toda la historia de los Estados Unidos, es bastante obvia y reconocida en general. La mejor prueba de ello es que al menos quince de sus presidentes han sido francmasones, desde George Washington, hasta George Bush padre (grado 33 del Supremo Consejo), pasando por Theodore Roosevelt (maestre en la logia Matinecock 806 de Oyster Bay en Nueva York)...
El caso es que exterminaron a los nativos americanos, dejando solo un puñado de esclavos aislados en algunas reservas, <<campos de concentración>>. La mentira, dio pie a una matanza descomunal, nunca conocida por los europeos. Disfrazados de indios tiraron los fardos al agua,; disfrazados de indios quemaban las casas de los colonos y así asesinaban a la gente para quedarse con las tierras del prójimo, y la culpa a los indefensos indios. Yo he sido testigo, y Dios ha querido que vinieramos a este mundo en este momento para avisar de lo que puede acontecer.
Todo lo que predijo Jesús en Apocalipsis se está cumpliendo, también lo dicho por Zarathustra: Se derretirán las montañas por causa de la maldad de los hombres... La tierra será plana y los justo pasará por los río de lava como si fuera leche templada y los malvados perecerán a sangre y fuego y serán llevados ante Dios, cara a cara, ojo con ojo, después del juicio al Cielo o al Infierno. Las logias, y muchas tradiciones son engaños del Diablo. No quiero que me crean, vean en su interior. Hagan regresiones a vidas anteriores, verán a los ángeles de Dios.
El Libro de la Vida se puede abrir con ayuda de un buen Terapeuta, invocando a Jesús a San Miguel ellos ayudan a cambiar lo que no nos gusta o nos hace daño, es decir, borramos del Libro de la Vida un acontecimiento desfavorable para nosotros o para nuestros hijos.
Dios es Amor y es misericordioso. El Diablo es el padre de la mentira y oculta el Infierno, su lema es hacer creer que él no existe, que el malo es Dios, Adonay. Dios y Jesús son el mismo. Lo dicen los Textos Sagrados: La Santa Trinidad: Dios Padre, Dios Hijo y Espíritu Santo. Jesús dijo, yo me voy al Padre, y os enviaré al Espíritu Santo. Él Paraclito os explicara lo que Yo le vaya diciendo, él ira recordando todo cuanto Yo hice en la Tierra, y lo que acontecerá en el futuro, él os lo dirá... Él se quedará siempre con vosotros, hasta el Fin de los Tiempos. No temáis y cumplid los Mandamientos de Moisés, y el Sermón de la Montaña...
Continuará, cuando así Dios lo quiera. Señor, bendice y certifica la obra de nuestras manos. Por favor acaba con estas guerras permanentes, siglos de guerras contra Dios y el cristianismo y los inventos del Demonio para separar a la Humanidad. Lucha por tu vida. Lucha por la Verdad. Lucha por la Paz de toda la Tierra. Amén.