jueves, 10 de febrero de 2022

El bosque mágico: Todo lo que vive es Ley y es conciencia

 Quizá la literatura en todas sus expresiones, empezando por la poesía no sea nada más y "nada menos" que una forma de mirar la vida. Ese concepto tan extendido y tan certero de "la mirada poética" define perfectamente el quehacer que durante muchos años ha ocupado a muchas personas con inquietudes filosóficas y religiosas. Es una valiosa facultad, un don altísimo y precioso, del que a veces los poetas no son conscientes. Esa manera de mirar, que es transustanciación y ensalmo y maravilla, que se posa sobre cualquier instante existencial, es especialmente eficaz cuando se mide el pasado: <<Hoy tengo todo el tiempo para mirar atrás>>, dicen los sabios: <<Cuando comprendamos realmente cómo se nos aplica y nos afecta la realidad, dejaremos  de hacer lo prohibido e insistiremos en hacer lo correcto. Entonces percibiremos la armonía existente entre nosotros y el mundo verdadero.>>

Mientras tanto, nos equivocamos de manera inconsciente y luego nos damos cuenta de que nos hemos equivocado. No podemos escapar a dicha situación.

Es por ellos por lo que la humanidad se encuentra en un callejón sin salida, inmersa en dificultades cada vez mayores. Descubriremos que no nos queda otra alternativa que reconocer que el mundo espiritual del cual formamos parte.

Este reconocimiento nos conducirá a una nueva situación, en la que comenzaremos a actuar conscientemente al unísono, y no como individuos aislados.

Todos estamos conectados en un alma, de una generación a otra. Compartimos una responsabilidad colectiva. Es por ello por lo que el cabalista es considerado <<fundador del mundo>>, ejerce influencia sobre el mundo entero y el mundo entero ejerce influencia en él.


Cuando pensamos o sentimos algo y deseamos transmitírselo a otra persona para que también lo sienta, utilizamos palabras. Existe un consenso general acerca de su uso y significado. Y hoy me emociona escribir estas palabras, por fin, espero poder reunir las palabras adecuadas y los relatos sean accesibles a los "lectores". 

Palabras como éstas no deben quedarse en la oscuridad del desconocimiento mundano. Aunque no sepa escribir, estos cuentos y relatos míos están escritos para navegar por estos ríos de Internet; el agua limpia y purifica y además nutre y tonifican las células humanas. Ellas nos hacen un gran favor, "digo las aguas de los ríos de Internet"; al consentir publicarlas, estas palabras vuelan  cerca del sol central para alumbrar la noche oscura de la humanidad; al comunicarnos su particular y valiosa extensión. Con la mirada en el antes y el después. Haciendo equilibrismo con los "corta y pega". Equilibrando el mundo con su poesía llegó Cervantes, Federico García Lorca, Garcilaso, y otros, que desde su locura, anuncian: Que el fin se acerca. Digo, que se acaba este particular sistema egoísta.

¿Que es poesía? Y a mi me lo preguntas. Poesía es, un niño corriendo en un parque con un sol cálido; un niño libre, un niño riendo, un niño bien alimentado. Es Febrero, el loco febrero es cálido y sereno; el terminado mes de Enero ha sido oscuro y sombrío; desmadejado, era ya interminable su sombra negra; a lo largo del camino invernal la nieve se poso sobre los valles y carreteras.

Quizá Don Invierno nos ha salvado, de esas voces extrañas de la guerra; aturdían ciegamente el regreso de las bombas y cañones; voces tremendas de todos los tamaños, y las letras y las palabras escritas, eran manchas sempiternas, ¿de tinta de calamar?, no de sangre. Y la mancha blanca extensa de la nieve de nuevo aparecía resbalarse entre los dedos de las promesas del viento del miedo.

Olor a pan tostado. Olor a café. Olor a Infierno, azufre y cuerno quemado es. El refugio confortable de los endemoniados el averno. Enero nos trajo el vivir pendiendo de los hilos de las telarañas, y así empezaban cada mañana los noticieros; con sus palabras indescriptibles; y conciliaba la voz poderosa del francés ¡Macrón!; conciliaba a las hordas aburridas, en medio de un vivir desconocido; que así se empezaba cada nueva mañana de este oscurecido Enero.

¡Oh,madres! El olor a libro nuevo, nostálgicos recuerdos se vienen y se van amontonando, ocultos los enigmas tras las páginas de la Biblia. Hoy, como ayer, despiertas en mi mente deseos de un nuevo mundo venidero que, ya no es desconocido, sé que existe. Un mundo que adivino en cada rayo de luz del alba de la Humanidad; veo que  cada alma se asoma en un brillo de los miles de ojos que me miran.

Hoy, como ayer, yo busco algo; busco en los libros; busco en la voz del viento; busco en mi corazón en esa voz que me dice: Una Primavera comienza; Febrero ha regresado y camina tan rápido. El corazón teme que el tiempo quede suspendido en su luz misteriosa que acaricia y calienta, en su palpitar constante; casi siempre va alocado buscando aquello que le falta. Ahora llegan los recuerdos. 

Ahora ya nada existe, las promesas rotas en su aire constante se han escarchado. Amor, amor y es que el amor tiene unos rostros; un hombre, unos niños y un abuelo cayado muriendo de pena, junto a un caballo solitario y mudo. Hoy tú vuelves de nuevo cabalgando en un soplo distinto he perdido el rumbo, hoy regresas lo mismo que entonces, aunque ya no escuchas los cascos temerosos, los pasos de los hombres metiendo miedo con las antorchas; y eran nuestras casas las que ardían; y eran nuestra familia; ¿no eres acaso el mismo hombre?; los niños ya no se asustan de las sombras; ni se esconden detrás del árbol; quedaron las trenzas de cabellos inertes incendiadas.

Pero es Febrero, el mismo de cada invierno, aquel mismo Febrero que vestíamos pieles de marmota o de oso blanco. Ahora ya nada existe. Solamente aquel entreabierto mundo del inframundo y el brillo cristalino de los ojos de nuestros niños, que aún me sigue iluminando los ojos; estos niños que no se asustan, porque han vuelto envueltos en la Luz limpia de Jesús, que les acaricia sus almas y la mía; y tú en un árbol con un nido con una pájara, que grita: cochino.

¡Cómo retorna ahora la fragancia del devenir de antaño por la pradera! La torre solitaria tiene altas murallas de musgo y piedra. El sol de Febrero es tan dulce y fragante, al compás de la campana de la cooperación y la solidaridad llega CRISTO de nuevo a esta tierra. Blancura, manos maniatadas y flores de Abril, la comitiva divina olvida las gotas de sangre que el CRISTO iba dejando a su paso.

¡Oh manos atadas! ¡Oh corona de espinas! ¡Oh cuerpo flagelado! ¡Oh, temblor de las tierras incendiadas! Penumbra de las ceras encendidas en la parca hipocresía, celosía barroca tan temida y enigmática esas ceremonias celebradas en las calles que tanto disgustan al CRISTO, en el llamado "día más feliz de su vida". 

Quizá porque expiró y se volvió al cielo librándose de la falsedad del mundo. El eco de las voces que se desprenden invisible en el ocaso, rozando sus destellos el trémulo fulgor de los ojos infinitos asombrado. Plumas de luz, que indican hacia dónde volar al cielo.

El simple hecho de mirar nuestro mundo, todo lo que contemplas, aunque parece estar fuera, está dentro de nuestro corazón, en tu alma inmortal que es la que proyecta los sentimientos y creencias y todo está contenido en las partículas de las que está hecho el Universo, piensa bien y cambia las partículas de lo que estamos mirando.

Muchos hombres, a lo largo de la historia de los siglos del planeta Tierra, que es una de las imágenes perfectas del Señor Dios Creador, han creído que existían dos mundos separados, contrarios e irreconciliables adonde iban a parar las almas de los hombres cuando transponían el dintel de la muerte. <<He de decir primeramente que sí existe un más allá de la vida terrenal, y he de decir igualmente por qué ocurre tal suceso:

<<El Creador Señor Dios, como se le conoce, es una fuerza, es una energía, es una potencia, es un sentimiento y es un pensamiento; todo ello genera el amor a la creación y de allí surge la vida. Por tanto, si el Señor crea, el Señor tiene que ir descubriendo nuevas formas de creación que ayuden al Cosmos a perfeccionarse, pues nada se crea para su estancamiento. Como muy bien saben los científicos, nada permanece eternamente inalterable; por tanto la muerte es la alteración de la vida, que posibilita a esta vida a subir un nuevo escalón. La muerte no está premeditada ni tampoco es azarosa, de igual modo que la alteración de las cosas de la Tierra se sabe que se produce por acción del hombre y de la naturaleza, y esta acción variada pero siempre dentro de un cierto y concreto repertorio.

 Veis, pues que todo en la vida es transformación porque todo en la vida es energía. Por eso en este momento quiero anunciar que nuestras vidas, nuestro mundo está cambiando, evolucionando hacia el bien original. Pues si el hombre supiera la cantidad de poder que con un deseo suyo cobra vida, el hombre, que aún no comprende esa capacidad, haría prodigios pero también haría desastres... Fin por hoy. Creo que hay censura. Administrador que veo una nube rayada es eso cierto, censura. No seas malage y deja que lo saque después de salir de este periodo de frustración, permite que siga escribiendo. La paz es posible. La solidaridad y la cooperación será posible porque CRISTO vuelve a la Tierra, pero, antes se limpiará de malas hierbas y de seres siniestros e inicuos. Está escrito. Gracias Internet.

Versión Completa. La neurociencia de las emociones. Marian Rojas-Estapé,...